Concepto, funciones y Composición del sistema financiero
Concepto de Sistema financiero
Para comenzar con el tema del SISTEMA FINANCIERO, comenzaré por delimitar qué es el Sistema Financiero, porque es mucho más que el sistema bancario.
Por tanto podemos definir "El sistema financiero como una estructura compuesta por un conjunto de intermediarios
que, regulado por organismos públicos, canalizan el ahorro de recursos hacia la
financiación del consumo familiar, la inversión empresarial y el gasto público".
También podremos definir "El sistema financiero como el conjunto de instituciones,
medios y mercados cuyo fin principal es canalizar el ahorro que generan las
unidades económicas con superávit (ahorradores) hacia los prestatarios o
unidades económicas con déficit (inversores)".
Funciones del sistema financiero
Fomentar
el ahorro.
Captar ese ahorro y canalizarlo
hacia la inversión. Al no existir coincidencia en general entre
ahorradores e inversores, el sistema financiero actúa de mediador entre los
mismos.
Ofertar
aquellos productos que consigan adaptarse a las necesidades de los
ahorradores y de los inversores, de manera que ambos obtengan la mayor
satisfacción con el menor coste.
Lograr la estabilidad
monetaria y financiera, haciendo que las instituciones
financieras se adapten a los cambios económicos, asignando a las autoridades
financieras los instrumentos de control adecuados.
Composición del sistema financiero
El sistema financiero está formado por:
Activos o instrumentos financieros.
Instituciones o Intermediarios financieros.
Supervisores. Ejercen el control sobre los
intermediarios
En esta entrada vamos a tratar el concepto de Dinero. Y empezaremos con el siguiente vídeo de una entrevista al catedrático Cándido Muñoz sobre el dinero y la banca:
1. DEFINICIÓN DEL DINERO
Podemos pues definir el dinero como el medio legal para realizar los pagos, que se representa por medio de monedas o billetes y se usa como unidad de medida en las transacciones económicas.
También podemos definir dinero como el medio de cambio o de pago-cobro generalmente aceptado.
2. FUNCIONES DEL DINERO:
I) Ser medio de pago, universalmente aceptado por todos los individuos que formen parte de ese país, para así facilitar los intercambios.
EJEMPLO: En los países integrados actualmente en la zona del euro, la moneda que se utiliza para realizar transacciones es el euro y es aceptada por los ciudadanos de todos los países para comprar y vender bienes.
II) Ser depósito de valor. Debe tener unas características de durabilidad o permanencia en el tiempo que permitan el ahorro (traspasar consumo presente a consumo futuro). EJEMPLO: Puedo decidir ahorrar para comprarme un coche dentro de un año (estoy transfiriendo un consumo que podría realizar hoy hacia el futuro) y para ello podría guardar mi dinero en forma de billetes de euro o en una cuenta corriente.
III) Ser unidad de cuenta común. Debe ser la unidad de medida en que se expresen los precios de todos los bienes y servicios que haya en la economía; esto se llama ser “bien numerario”.
EJEMPLO: En la actualidad todos los precios de los bienes y servicios que se adquieren en España están expresados en euros (el euro es la unidad de cuenta en nuestro país desde el año 2002, y antes de esa fecha lo era la peseta). Así, cada economía tendrá su propia unidad de cuenta; por ejemplo, en Estados Unidos es el dólar o, en Japón, el yen.
3. HISTORIA DEL DINERO
TRUEQUE
En las sociedades primitivas, antes de la existencia del dinero, los individuos realizaban sus transacciones mediante el TRUEQUE, es decir, intercambiando directamente unas mercancías por otras. Pero el trueque era costoso en términos de tiempo y de esfuerzo, además supone un problema la indivisibilidad de algunos bienes y la necesidad de la doble coincidencia de deseos. Es decir, los individuos tienen que encontrar una contrapartida que desee lo que ellos ofrecen y que ofrezca justamente lo que quieren.
EJEMPLO: Imagine un peluquero que desea unos zapatos y encuentra un zapatero que podría vendérselos pero que lo que desea comprar es harina. En este caso, el intercambio no sería posible, porque no se produce la “doble coincidencia de deseos”. Entonces, o bien el peluquero espera a que el zapatero necesite un corte del pelo, o bien el peluquero encuentra a un molinero que justamente necesite un corte de pelo a cambio de harina que a su vez intercambiará por los zapatos. Obviamente, esta práctica tiene importantes costes en forma de búsqueda de la contrapartida apropiada o en forma de tiempo de espera hasta encontrarla y, una vez que se encuentra, en forma de acuerdo sobre el número de unidades de cada bien que cada individuo está dispuesto a entregar/recibir. Por este motivo, apareció el dinero.
DINERO MERCANCÍA
Se denomina DINERO MERCANCÍA a aquellos bienes que se caracterizaban por ser un bien demandado por los individuos para ser consumido y demandado como dinero, lo que implica que su valor final está respaldado por tener valor por sí mismo como bien de consumo. ¿qué bien podría ser considerado como “dinero”? Cualquier bien que cumpliera las tres funciones mencionadas en el punto anterior podría ser considerado dinero mercancía. Pero...
Para cumplir la función medio de pago, un bien debería tener las siguientes propiedades intrínsecas:
1- homogeneidad, es decir, unidades idénticas o parecidas;
2- tamaño y peso pequeños en relación con su valor;
3- divisibilidad en unidades suficientemente pequeñas para poder intercambiar cualquier bien.
Para cumplir la función depósito de valor, un bien debería tener las siguientes propiedades:
1- durabilidad, es decir, para poder ser un medio de mantener riqueza (ahorro) ha de ser duradero en el tiempo;
2- dificultad de falsificación, ya que, si cualquiera pudiera producir dinero, perdería su valor. De hecho, a lo largo de la historia ha habido distintos bienes que han desempeñado este papel. El oro, la plata y los metales preciosos han sido con frecuencia las mercancías elegidas en los últimos 4.000 años como dinero. Más antiguamente, en el Alto Egipto, se utilizaban las conchas; en Mesopotamia, la cebada; en algunas sociedades del Extremo Oriente, el arroz; cigarrillos y bebidas alcohólicas en Alemania en el período inmediatamente posterior a la II Guerra Mundial, y así se pueden encontrar miles de ejemplos de bienes que han desempeñado el papel de dinero en distintas sociedades y en diversos periodos históricos. Sin embargo, una economía organizada con dinero mercancía sería una economía ineficiente. En efecto: si los intercambios pudieran realizarse con un bien carente de valor pero que fuera aceptado de forma generalizada por todos los individuos, éstos estarían en una situación mejor, ya que el bien que hace la función de dinero mercancía quedaría liberado para ser consumido. De esta manera, surgió un nuevo tipo de dinero, el denominado DINERO FIDUCIARIO
DINERO FIDUCIARIO
El dinero llamado fiduciario (del latín fiduciarĭus, de fiducĭa 'confianza' y ésta a su vez de fides 'fe'), es el que se basa en la fe o confianza de la comunidad, es decir, que no se respalda por metales preciosos ni nada que no sea una promesa de pago por parte de la entidad emisora. El dinero fiduciario no tiene valor en sí mismo pero es aceptado de forma general como medio de pago y depósito de valor. Los billetes y monedas que manejamos en la actualidad pertenecen a esta categoría de dinero fiduciario. Se dice así que el dinero fiduciario no está respaldado y su valor viene dado por la credibilidad de la entidad que lo emite ante el público que lo acepta como medio de pago. Normalmente, la capacidad de emisión está en manos de los bancos centrales de los países respectivos. En nuestro país, nuestro banco central es el Banco de España y es la institución que se encarga de la emisión de los billetes de euros según mandato del Banco Central Europeo.
Así el valor de cada billete de euro que un individuo tiene en su monedero depende de nuestra confianza en dicha institución, traducido en la seguridad que tiene el individuo de que los euros le servirán para realizar los pagos a los que esté obligado por sus compras de bienes y servicios.
Una de las ventajas es que la moneda fiduciaria no es un recurso escaso como puede ser el oro, de este modo los Bancos Centrales tienen un mayor control sobre su oferta y su valor, por tanto existe un menor riesgo.
4. CLASES DE DINERO FIDUCIARIO
En la actualidad, son dos las formas de dinero fiduciario:
DINERO LEGAL
El dinero legal está constituido por los billetes y monedas emitidos por una institución competente, y que es la que circula en la economía.
En España como país de la Unión Europea y de la zona euro su moneda de curso legal es el euro desde el 1 de enero de 2001. Para todos los países de la zona euro el organismo que emite y controla la cantidad de dinero en circulación es el Banco Central Europeo (BCE).
DINERO BANCARIO
El dinero bancario es el que figura anotado en distintos tipos de soporte, pero que solo existe virtualmente porque el dinero bancario está en el banco mediante una anotación en cuenta.
El dinero bancario es aquel dinero legal depositado por las personas en los bancos en forma de diferentes productos bancarios, principalmente depósitos, este dinero legal desaparece físicamente y nace como dinero bancario.
El dinero bancario no incluye el dinero efectivo en circulación pero sí el dinero líquido en manos del público que se encuentra depositado en cuentas con disponibilidad inmediata y depósitos bancarios.
5. IMPORTANCIA DEL DINERO BANCARIO, RESERVA FRACCIONARIA, Y LA CREACIÓN DE DINERO
El dinero mantenido en depósitos permite a los bancos conceder préstamos utilizando los depósitos de sus clientes, lo que hace aumentar la cantidad de dinero existente en la economía.
El dinero bancario permite a los bancos crear más dinero debido a que las personas que poseen cuentas corrientes no retiran sus depósitos simultáneamente y, a su vez, a los bancos se les obliga a mantener como coeficiente solo una fracción del total de los depósitos. Debido a que este comportamiento es el mismo en todos los clientes, los bancos pueden estimar cuánto es el capital mínimo con el que siempre pueden disponer.